05 jun 2017
Propongo algunas reflexiones parar hacer más evidente, si no lo era, la importancia de fijar bien los objetivos para alcalzar el éxito.
Més informacióEl cambio nos llega desde todas direcciones y cuesta verlo venir, tanto desde un punto de vista personal como profesional.
El cambio nos llega desde todas direcciones y cuesta verlo venir, tanto desde un punto de vista personal como profesional. Sin embargo se pueden vislumbrar algunos caminos que tendremos que recorrer para, primero aprender y segundo manejar, para pilotar los “vaivenes” en los que nos vamos a encontrar en el futuro inmediato. Apunto alguno de estos caminos:
1r. TIC: Estamos en la época de internet de las cosas y de la impresión 3D y este fenómeno abre puertas y nos proyecta a un futuro inimaginable.
2. Educación (enquistada): La educación básica que debería ser el motor del cambio, sigue en manos de los mismos responsables que en el siglo XX y algunas entradas de nuevos directivos inexpertos y dogmáticos no auguran a la educación el papel que le correspondería.
3. Desinformación (informada): La avalancha de información permanente a la que nos vemos sometidos impide centrar estrategias de futuro, entre otras causas por la desinformación que genera la cantidad de información y la inseguridad de tener información fiable.
4. Falta de valores: La sociedad actual, carece de valores con los que enfocar el cambio. Los valores son y han de ser la brújula del cambio, lo que nos orienta y da criterio para las decisiones. Y en ausencia de criterio o todo es válido (que no) o se dan palos de ciego (que no nos llevan a ninguna parte)
Falta experiencia, creatividad, … y sobra miedo para tomar decisiones de cambio real. Hay que afrontar el cambio con rigor, trabajo, exigencia, eficiencia y realismo.